El Proyecto MATE y la escuelita de la selva

Memorias del primer día de clase

Fue una mañana de marzo del año 2007, un lunes para ser más precisos. El caminito que llevaba a la escuela viboreaba entre una niebla que, como dijo Francisco – uno de los maestros y coordinador indígena del proyecto- era buena señal. Tatachina, la niebla que da vida, aquella mañana envolvía nuestras ansiedades y nuestras dudas que podían resumirse en unas pocas preguntas: ¿Seríamos capaces? ¿Podríamos llevar a la práctica aquello que diseñamos en los papeles? ¿Estaríamos en condiciones, entre todos y todas, de construir un espacio de aprendizaje intercultural? Cuando el sol entró por las ventanas de la escuelita construida por los mismos paisanos, adentro era una fiesta. La abuela Clemencia, Ernesto, entonces el cacique de la comunidad, Francisco Franco, Ricardo Fernández y el siempre recordado Rául Correa, todos maestros indígenas, Lucas Areco, nuestro primer capacitador no indígena, el resto del equipo del Proyecto MATE y los alumnos y alumnas compartíamos risas, esperanzas y sueños.

Pasaron muchos años desde esa mañana, más de trece años en los cuales desarrollamos más de cinco módulos de capacitación laboral relacionados directamente con el Turismo Indígena, módulos de Inglés, Teatro y Comunicación, Gastronomía y Computación. Muchos de ellos se replicaron varias veces. Presentamos y ganamos un proyecto a la IAF (Fundación Inter Americana) que permitió la puesta en marcha de su emprendimiento turístico manejado íntegramente por jóvenes de la Tekoa Yryapú. En el año 2013 cuando decidimos que, para ser coherentes con nuestro propósito de la autogestión, era el momento de que el Proyecto MATE se retirara, la misma comunidad nos pidió que siguiéramos para ofrecer el servicio de primaria para adultos que comenzó al año siguiente y continúa hasta ahora.

Hoy cuando vemos el crecimiento y la organización propias del emprendimiento turístico Yryapu Turismo Guaraní y nos llegan noticias de que muchos de aquellos jóvenes que han sido alumnos de la escuelita de la selva, como la llaman en los medios, están liderando emprendimientos similares en varios puntos de la provincia sentimos un inmenso orgullo.

Mgtr. Viviana Bacigalupo
Coordinadora Pedagógica